- Los seguidores del Hapoel Bank Yahav Jerusalem quieren tomar la ciudad andaluza.
Por José Luis Hernández/ Fotos: BCL Photo
Aguere-La Laguna (Tenerife), 25 de abril de 2022
Después de que este martes se haya celebrado, en el Museo Picasso de Málaga, el sorteo de la Final Four de la Basketball Champions League que la capital de la Costa del Sol acogerá del 12 al 14 de mayo próximos, la afición del Hapoel Bank Yahav Jerusalem, rival del Canarias en la primera semifinal, calienta motores.
Como ya sucediera el año pasado en la Final a Cuatro de Bilbao, los aficionados foráneos, especialmente los de Israel se darán cita en masa. Los israelíes viven un año de altas emociones deportivas, con el título de Copa después de vencer al Maccabi y también en esta Final Four de la BCL, evento que aspiraron a organizar con un montante económico muy superior al de Málaga. En Jerusalem se habla incluso de que su nuevo propietario está meditando la posibilidad de dar el salto a la esfera de la Euroliga a través de la Eurocup, con la ambición de consolidarse y que esa fue una razón de peso para que la BCL escogiera Málaga pese a la potente oferta rival. También por motivos de seguridad, algo que es obvio dado los últimos acontecimientos acontecidos entre Israel y Palestina.
«El Hapoel está trabajando activamente para obtener la mayor cantidad posible de entradas», explicaba en un comunicado la entidad deportiva de Jerusalem, en el que también insistía en que «el club se encargará del vuelo de todo los aficionados, así como de transportarlos desde el centro de la ciudad hasta el pabellón. Además, el personal del club está en contacto con la BCL con respecto a las medidas de seguridad», añadieron. De momento, cada equipo tiene un paquete de 567 entradas pero, seguro, que los israelíes serán muchos más en el Martín Carpena.
Ya se pudo ver el ambiente que hubo en su pista en el tercer y decisivo partido ante AEK de Atenas. También se vio como otro Hapoel, en este caso de Tel-Aviv, llevaba un número importante de seguidores a Badalona, unos 1.500, para el partido de cuartos de final de la Eurocup hace pocas fechas.