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El tridente canarista, Vázquez, Beirán y San Miguel, importante en el juego de la selección.
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España ya mira a China 2019 y se clasifica para la segunda fase tras vencer a Montenegro.
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José Luis Hernández / @JoseLuisHdezT7
Fotos: FEB
27 de febrero de 2018
ZARAGOZA – La España más canarista, con Fran Vázquez, Javi Beirán y Rodrigo San Miguel, ya está en la segunda fase de clasificación para el Mundial de China de 2019. Lo hace con una intachable serie de cuatro victorias en otros tantos partidos, dos Ventanas FIBA, y lo consiguió después de doblegar a una Montenegro mejorada respecto al partido del pasado mes de noviembre en Podgorica, localidad natal del ex aurinegro Blagota Sekulic.
Esta nueva victoria de los hombres de Scariolo, aumenta el mérito y la épica de este grupo de jugadores que no sólo llevan una inmaculada serie de victorias, cuatro de cuatro, sino que aventajan a la segunda selección, Eslovenia, en dos victorias.
España volvió a tirar de orgullo y talento y se volvió a mostrar superior aunque no dejó de sufrir ante los pívots visitantes. Al descanso, 46-39 con 8 triples pero sin margen para la más mínima relajación local.
Un mate del canarista Fran Vázquez y un triple del jugador del Gran Canaria Aguilar, abrieron el tercer cuarto dando mayores cuotas de seguridad al equipo de Scariolo. El equipo nacional mostró un alto nivel, dando espectáculo a los más de 9.500 aficionados que se dieron cita en el Príncipe Felipe, como un alley-oop entre Colom y Vázquez (61-49, minuto 24), pero Montenegro ha seguido exigiendo el máximo. Con dos tiros libres de Sáiz, España logró su máxima ventaja en el marcador (64-50, minuto 29), poco antes de finalizar el tercer periodo.
Los diez últimos minutos han arrancado con la mejor versión de España. Gran intensidad defensiva, dominio del rebote y acierto anotador. Un triple de Vidal puso dieciocho puntos arriba a la selección española (73-55), que supo mantener el tono y cerrar el arco de tres puntos a los exteriores montenegrinos, que a medida que fueron pasando los minutos perdieron acierto cara al aro.
