Fotos: Cedidas / BCL
José Luis Hernández (sbc) La Laguna (Tenerife)
Publicidad
El Iberostar Tenerife Canarias lo ha vuelto a hacer. La "squadra canarino" sacó su orgullo y calidad para imponerse, en un final de infarto, al Sidagas Avellino (75-76), en un partido que se decidió a falta de dos segundos gracias a una canasta de dos puntos del norteamericano White más tiro adicional. Aparte de la magnífica victoria canarista, cabe reseñar la vuelta a las pistas del lituano Marius Grigonis y el gran partido realizado por el pívot griego Bogris.
Bassas, de nuevo, titular
El doble cero aurinegro, Rodrigo San Miguel, igual que en Liga Endesa, empezó el partido sentado en el banquillo, saliendo como base titular el catalán Ferrán Bassas. La rodilla de Davin White respondió y el estadounidense también fue de la partida.
Aaron "ametralladora" Doornekamp empezó muy acertado de cara al aro, de hecho anotó los cuatro primeros puntos aurinegros (2-4, 2’) en una buena salida de los jugadores laguneros ante uno de los mejores equipos italianos, en el que Thomas, uno de sus jugadores más importantes, logró la primera ventaja para los italianos (5-4, 2’). Bogris asumió a la perfección su rol en el choque de hoy, convirtiéndose en uno de los mejores jugadores aurinegros, si no el mejor, del primer cuarto, en el que el heleno firmó ocho puntos (11-14, 6’).
El italo-argentino Richotti entró en la pista a falta de 2’21” para concluir el primer periodo, para seguir acumulando minutos de juego y sentirse cada vez mejor. White, Bogris y Nico sumaron un parcial de 0-8 para los tinerfeños (15-22) que forzó la solicitud de un tiempo muerto por parte del banquillo local. El Canarias no se achicó, es más, crecieron en la pista a pesar del duodécimo punto de Thomas (17-22), porque Javier Beirán, desde más allá de la línea de tres, y Tim Abromaitis, en el último segundo del cuarto, lograron la máxima ventaja canarista (17-27).
Pírrico segundo cuarto
Le costó entrar en el partido al equipo lagunero en el inicio del segundo periodo pero, a pesar de las segundas y terceras oportunidades en algún ataque de los italianos, el marcador parecía inamovible (20-27, 12’). Bogris volvió a saltar a la pista para sustituir a un Petit Niang desdibujado, lo mismo que Davin White con Nico Richotti. Beirán, de nuevo de tres, a falta de 6’ para concluir este cuarto, rompía la mala racha anotadora (20-30), momento en el que entró Carl English en la pista.
El periodo ganaba en intensidad pero bajaba la capacidad anotadora de ambos equipos. Un parcial de 4-0, dos canastas consecutivas de Randolph, para los transalpinos obligó a Txus Vidorreta a pedir tiempo muerto (24-30, 16’). Volvió a saltar al parqué Bassas pero todo siguió igual. El Canarias se había quedado anclado en unos pírricos tres puntos en el cuarto hasta que volvió a aparecer Bogris (26-32, 18’). Los italianos fueron recortando la diferencia hasta colocarse a tan solo dos puntos (33-35, 19’) tras una canasta de Green, toda una institución en el club verdinegro pero surgió el incombustible Carl English, que excelente momento de forma el suyo, y anotó un triple, dando oxígeno a los laguneros al finalizar el segundo periodo (33-38).
Máxima igualdad
Thomas y Ragland anotaron en dos ataques consecutivos para igualar la contienda (38-38, 21’) mientras los jugadores aurinegros parecían poseídos por la ansiedad y la precipitación ofensiva. Dichas circunstancias fueron aprovechadas por los locales, que aumentaron el parcial con un 7-0 (40-38,22’) solo contestado por otra canasta del activo Bogris (40-40).
Davin White forzó la tercera falta personal de Randolph, mientras Bogris seguía anotando, el punto dieciséis en su haber particular (40-42, 23’). Randolph, tocado en su orgullo, respondió con cinco puntos consecutivos (45-42, 24’), pero Nico Richotti, de tres, y Will Hanley, de dos, situaron a los visitantes otra vez por delante (45-47,24’). Randolph, en cancha aún con tres faltas personales, seguía sumando para los suyos (50-49, 26’), intercambiando canastas con Javier Beirán que rubricó un inmaculado 5 de 5 en triples (52-55) pero aún hubo tiempo para un mate de Launin, que cerró el periodo (54-55), para el equipo lagunero.
Final de infarto
Con el partido en el aire, Bogris se colgó de la canasta italiana en el primer ataque del periodo final (54-57, 31’), aunque Thomas volvía a anotar (58-57, 32’), con mate y triple posterior (61-59, 32’). Green, también desde el perímetro, completó un parcial 6-0 (64-59, 33’) que forzó de nuevo a Txus Vidorreta a solicitar tiempo muerto para frenar el ímpetu italiano.
Apostó el vasco por poner en la pista a Carl English y Marius Grigonis al mismo tiempo, con 64-62 en el marcador y a falta de 5’55” para el final del partido. Randolph amplió la ventaja para los verdiblancos (68-62), pero una mayor intensidad defensiva aurinegra y un parcial de 2-7 con cuatro puntos del "imprescindible" English, dio de nuevo la oportunidad a los de la ciudad de La Laguna de ponerse en ventaja al forzar una falta en ataque (70-69, 37’).
Erró English su lanzamiento de tres. A falta de dos minutos seguía perdiendo por uno el conjunto presidido por Félix Hernández y Randolph, otra vez, amplió la ventaja italiana a 1’54” del final (72-69). Respondió nuevamente Bogris con su punto número veintidós en un gran "pique" entre ambos (72-71). Beirán trató de empatar el 74-71 con un triple de 9 metros que se quedó corto, aunque recuperó el balón en defensa para buscar el empate en el siguiente ataque.
Los de Stefano Sacripantiario forzaron falta personal para evitar el triple, y Davin White anotó para acercar aún más al Canarias (74-73), pero con posesión de balón para los transalpinos. Con solo 16 segundos de juego, los canaristas llevaron a Thomas a los tiros libres. Anotó el primero pero erró el segundo (75-73), dejando esos valiosísimos 16 segundos para que el Canarias tuviera la oportunidad de, al menos, forzar el tiempo extra. Davin White volvió loco a su defensa y en una gran penetración anotó y recibió la falta personal. No erró el base americano desde el 4,60 (75-76) y defendió bien la siguiente acción en la que Ragland falló sobre la bocina, rubricando una nueva victoria, de mucho prestigio, para el equipo amarillo y negro.