El Canarias se pasea ante un débil Manresa (84-51)

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  • El Iberostar Tenerife Canarias se paseó ante el descendido ICL Manresa (84-51) en la despedida de la temporada regular de la Liga Endesa. Los laguneros acumularon unos guarismos históricos, 22 victorias y 10 derrotas, para concluir en la quinta posición final, lo que les hará afrontar el Playoff por el título con el factor cancha en contra.

Fotos: ACB Photo / A. Pérez. José Luis Hernández (sbc) La Laguna (Tenerife)

El EuroCanarias comenzó el partido, al igual que el pasado jueves en Barcelona con acierto desde la línea de tres puntos, comenzando así un intercambio de canastas (6-6, 3’), que le sirvió para colocarse por delante con un nuevo triple del argentino Richotti (9-6). El «concurso de triples» aurinegro reflejaba un cien por cien de efectividad: tres triples de tres jugadores diferentes. Los del Bages se volvieron a colocar por delante en el luminoso (9-11, 5’) antes de un segundo triple del «júnior» Kirksay (12-11) devuelto por el visitante Auda, máximo referente ofensivo de los manresanos hasta ese momento con siete puntos (12-14, 6’).

Se incorporaron al juego canarista Grigonis, recientemente convocado para la preselección de su país, y Davin «Globetrotter» White, que comenzó a meter balones en la pintura para que el heleno Bogris igualara de nuevo el marcador (14-14, 7’). Grigonis anotó el quinto triple de los aurinegros de siete intentos totales, devuelto por Aranitovic (17-17, 7’) en un impás del juego donde las defensas comenzaron a brillar por su ausencia. Ferran Bassas anotó, también de tres puntos, para entrar en los dos últimos minutos del primer periodo con tres puntos de ventaja (20-17). El Canarias, después de anotar 7 triples de 12 intentos, consiguió un parcial de 14-3 que les dio oxígeno (26-17) en la recta final de los primeros diez minutos de juego.

Salió Manresa con la lección aprendida en el segundo cuarto y se puso serio e intenso en defensa. Además, Costa anotaba desde el perímetro (29-23, 13’), pero Davin White, con dos tiros libres y una asistencia para un dos más uno del norteamericano Hanley (34-23, 13’) volvieron a situar a los canaristas por encima de la barrera psicológica de los diez puntos. En ese momento comenzaría el «show de Niang«, colocando dos tapones a la altura de los focos del pabellón y realizando un mate espectacular, contundente, al que acompañó con una jugada de dos más uno que devolvió el fervor a la fiebre amarilla (39-25, 16’), llegando al descanso con 12 puntos (41-29) y el encuentro totalmente controlado por los jugadores que lucen el Teide en el pecho.

Un triple de Aaron «ametralladora» Doornekamp en el inicio del tercer periodo distanció, aún más, a los de Vidorreta (44-29, 21’), que se situaron en los 17 puntos (49-32 y 51-34, 23’). Davin White y Tariq Kirksay se sumaron al festival de triples local (57-36, 25’) para firmar un escandaloso 11 de 23. El partido se acababa para los visitantes. El Canarias mareaba la pelota en ataque con una excelente circulación de balón (60-36, 24’), ante un Manresa desbordado y desdibujado.

Los tinerfeños llegaron a tener una diferencia a su favor de 25 puntos (66-41, 29’) como renta máxima antes del último minuto del tercer cuarto. Para entonces, Mamadou «Air Senegal» Niang se había convertido en el protagonista del choque y Manresa, víctima del vendaval aurinegro, perdía continuamente el balón, para acabar el tercer periodo con 23 puntos de desventaja en el videomarcador (66-43).

Las cosas siguieron igual en el último periodo. Espesos y sin ideas ofensivas, los catalanes se habían quedado anclados en el punto 43, mientras el Canarias seguía anotando (69-43, 33’). El Canarias no parecía levantar el pie del acelerador, pero el juego perdió algo en velocidad (72-43, 35’) y con cuatro puntos seguidos de Will Hanley (79-45, 36’), la diferencia se acercaba a los cuarenta puntos, en un partido que parecía no tener fin para los visitantes.

Vidorreta aprovechó la tesitura para poner en pista a Omeragic, una vez más sin su nombre en la trasera de su camiseta como ya pasara en algunos partidos de la BCL, y Niang seguía a lo suyo, espectacular tanto en ataque como en defensa. No hubo para más y Manresa pareció agradecer que el partido llegara a su fin (84-51).

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